Vuelve, vuelve tarde pero vuelve, vuelve a mí si te pierdes.

domingo, 15 de septiembre de 2013

Echarnos la culpa en vez de echarnos de menos

Hemos decidido vivir esta rutina, ya no existe la ilusión del "buenos días" cada mañana. Tomando el camino más fácil, siempre lo menos complicado, siempre aquello que nos parece al alcance de la mano.
Y echarnos la culpa en vez de echarnos de menos es la solución que le ponemos.
Le pondría energía si volviera a ver esa ilusión que vi aquel día en sus ojos. En esos ojos en los que me encanta perderme. En los mismos ojos que con rabia me quitan la mirada, y me dejan desolada... a la deriva, al fin del mundo desnuda de sentimientos. Vísteme de amor, es lo que mejor me queda.
Que pedir cariño es muy despechado, que pedir amor es siempre pedir demasiado, que querer sin recibir... doloroso. Sin duda.
Cuando aparecen las preguntas las respuestas se vuelven demasiado esperadas, tan obvias que nunca es suficiente (nunca más).
El detalle de estar siempre pendiente. Y callar, que el silencio duele más, dicen.
Para que al final resulte que no era tan difícil, ni mucho menos (ni mucho más) sencillo. Cuesta arriba pesa el doble...

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